Recomendaciones

¿Cómo puedo desactivar mi ansiedad?

Lo primero: Comprender lo que nos pasa

Cuando percibimos una amenaza presente o futura nuestro cuerpo prepara para enfrentarla, experimentamos sensaciones corporales como la aceleración de nuestra respiración y la intensificación de los latinos de nuestro corazón. Se tensan nuestros músculos, nos puede doler la cabeza o percibimos una sensación extraña en nuestro estómago. Cuando estas sensaciones se prolongan por mucho tiempo y parecen no desaparecer por si sola, comenzamos a experimentar una preocupación excesiva por esta situación, solemos perder calidad en nuestro sueño y se comienza a deteriorar nuestra capacidad para trabajar o estudiar, y nuestras relaciones personales. En este momento estamos frente a una posible ansiedad.

La ansiedad es producto de una evaluación que hace nuestra mente de dos cosas esenciales: La amenaza que percibimos inicialmente y los recursos con los que contamos para hacer frente a esa ansiedad. Solemos traer a nuestra mente pensamientos o imágenes persistentes sobre esta amenaza. Suelen presentarse en forma de preguntas (ej. “¿Qué pasará si…?” o ¿Cómo haré para..?, ¿Y si no le gusta…?) y en esencia suelen insinuar un mensaje: “Esta amenaza puede hacerme daño o hacerle daño personas que son importantes para mi” “estoy/estaré en peligro”. Es decir, solemos pensar que somo vulnerables a esta amenaza.

Al tiempo, solemos tener dificultades para reconocer los recursos persónale so sociales con los que contamos para hacer frente a dicha amenaza. Ignoramos o minimizamos nuestras capacidades personales para solucionar los problemas, superar los obstáculos o alcanzar las metas propuestas; evaluamos negativamente nuestras habilidades para comunicarnos o persuadir a los demás, y podemos percibir que nadie tiene la capacidad de ayudarnos, o al menos una buena disposición para hacerlo. Es recurrente que nos sintamos desesperados y nos cueste identificar una solución posible a esta amenaza.

Para poder transitar apropiadamente el estrés y disminuir la ansiedad necesitamos entonces atender estos dos elementos. A continuación, te brindamos algunos consejos claves para esta labor:

Identifica que causa o desencadena tu estrés

Para poder evaluar apropiadamente la amenaza debemos reconocerla. En ocasiones, cuando le damos una segunda mirada a la situación nos damos cuenta de que no era tan compleja como la percibíamos cuando nos dejamos llevar por la emoción. Si efectivamente es una situación difícil de afrontar, analizar con perspectiva nos ayuda a reconocer que necesitamos para hacerle frene.

 

Aprende herramientas para afrontar la situación

Aquí hay algunas actividades que puede intentar cuando comience a sentirse abrumado(a):

  • Realiza ejercicios de “Mindfulness”. Te puedes ayudar de alguna aplicación móvil o sesiones que disponen las principales plataformas de streaming como Netflix. Este tipo de ejercicios te permiten desactivar tu cuerpo al tiempo que mantienes tu mente enfocada en el presente, realizas respiraciones controladas y usas tu imaginación para ayudarte a desestimar los pensamientos que te causan ansiedad.

VER VIDEO: ¿COMO USAR EL MINDFULNESS?

VER GUÍA HEADSPACE: RELAJA TU MENTE

PROGRAMA DE REDUCCIÓN DEL ESTRÉS

Respira de forma pausada y rítmica

Manteniendo la mente en el aquí y ahora, Inhala 12 segundos y exhala todo lo posible. Repita varias veces la secuencia hasta que la exhalación sea más lenta que la inhalación y se sienta más calmado(a). Este ejercicio busca disminuir el ritmo de tu respiración, para lograr cambios en la actividad simpática y parasimpática, reduciendo así sus niveles de activación emocional.

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No descuides tus hábitos

Asegúrate de hacer ejercicio, tomar una buena cantidad de agua y comer comidas saludables y regulares.

Debes procurar dormir bien

Cuando no descansamos apropiadamente nuestro sistema nervioso se mantiene activo y sensible, lo cual facilita que sintamos ansiedad. Para ello es esencial que sigas una rutina de sueño que te prepare para el descanso y evites el uso de los teléfonos móviles al menos 30 minutos antes de dormir.

Evita beber estimulantes

El exceso de cafeína, energizantes y otras sustancias estimulantes interrumpen el sueño y afectan la forma como reaccionas a los retos cotidianos. Su efecto en nuestro organismo nos mantiene alerta y facilita los estados de ansiedad.

Identifique y desafíe sus pensamientos negativos

En especial, aquellos que resultan conclusiones sin evidencias. Este video le acompaña para que paso a paso aprenda a identificar y cambiar sus errores del pensamiento:

Comuníquese con sus amigos o familiares

Mantener conversaciones fluidas con las personas que nos rodean nos ayuda a sobrellevar que la situación de manera positiva.

Realiza una lista de tus recursos personales

Cuando nos sentimos muy ansiosos nos cuesta reconocer nuestros propios recursos, por eso resulta útil que en momentos de más calma y serenidad, anotemos los recursos con los que contamos para sobrellevar las situaciones difíciles y mantengamos la lista con nosotros (en el celular o un diario). De esta forma podremos consultarla con facilidad como un buen recordatorio de nuestras habilidades.

Lleva un diario

Llevar un registro diario de nuestras emociones y pensamientos nos ayuda a monitorear nuestro estado de salud y anticiparnos a las reacciones de estrés o ansiedad. Además, nos ayuda a reconocer que herramientas nos funcionan mejor para hacerle frente a nuestras emociones. En el mercado también existen aplicaciones móviles que nos ayudan con esta tarea y que hacen más fácil y divertido el registro de nuestras emociones y experiencias. Te dejamos aquí algunas para que explores e inicia tu diario:

VER ARTICULO SOBRE MOOD TRACKER APPS

Si a pesar de realizar estas sugerencias los síntomas de estrés o ansiedad no desaparecen. Si aún te cuesta trabajar o estudiar como solías hacerlo, puede que sea el momento de hablar con un profesional. La psicoterapia y los medicamentos son los dos tratamientos principales para la ansiedad, y muchas personas se benefician de una combinación de los dos.

Fuente:

National Institute of Mental Health, NIH. (2021, April). I’m So Stressed Out! Fact Sheet (NIH Publication No. 20-MH-8125).  https://www.nimh.nih.gov/health/publications/so-stressed-out-fact-sheet#part_6633

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